Veracruz: la guerra silenciada

Ante los ataques a periodistas en la zona Veracruz-Boca del Río, la cobertura de información policiaca se hace con pinzas. Pocas son las notas que trascienden sobre ajustes de cuentas entre bandas del crimen organizado, lo que ha generado una falsa percepción de tranquilidad. Sin embargo, la batalla sigue

JORGE MORALES

La guerra que libran cárteles del narcotráfico, que ha convertido en campo de batalla las turísticas calles de la zona conurbada Veracruz Boca del Río y los municipios aledaños a estos, no tiene tregua: 181 ejecutados en 2012, a los que se suman ya más de medio centenar en el presente año

Decapitados, torturados, apuñalados, amordazados, embolsados, degollados, “osamentados”, “encintados”, figuran en el registro oficial como una simple y fría estadística difundida por la Secretaría de Marina-Armada de México, responsable de la coordinación del área de seguridad en esta región, ‘la joya de la corona” del narco en Veracruz.

No obstante, los hechos parecen haber ocurrido en medio de un pavoroso y ominoso silencio mediático.

– Hay la percepción de que en la zona conurbada se paró la ola de violencia pues ya no se publican eventos de ejecuciones en muchos medios, ¿es correcta esa apreciación?, se le pregunta a un periodista que pide el anonimato.

“Así es, la percepción tiene que ver directamente con lo que sale en los medios, como ya no los sacan, la gente cree que ya no pasa nada”, sentencia.

Pero sí pasan.

Una densa capa de miedo, censura y autocensura, ha silenciado los detalles de estos hechos en medios y periodistas que sólo buscan “sobrevivir” a esta guerra.

Las amenazas están a la orden del día y el ocultamiento de los hechos por parte de la autoridad local es moneda corriente.

AMENAZAS Y AUTOCENSURA

Un experimentado comunicador duda que las amenazas sólo provengan de los cárteles y presume que puedan también formar parte de una estrategia oficial para ocultar una incómoda realidad.

“Se piensa también que el gobierno las encamina pues se han recibido llamados de presuntos grupos delincuenciales que amedrentan al reportero para que no publique”, confiesa.

En este ambiente enrarecido para el periodismo y los periodistas, no es difícil que las muertes vinculadas a la delincuencia organizada se publiquen disfrazadas de otra cosa, incluso de asesinatos pasionales en una escena del crimen plagada de casquillos.

Dice alguien más: “en lo que a mi respecta, cuando es un ejecutado de cualquier forma trato de saber si es manejable o no. Si es no, simplemente no lo público, pero de que, ha pasado ha pasado. Lo cierto es que mis compañeros y yo no lo hacemos con el fin de perjudicar o engañar al lector si no como una forma de salvaguardar nuestras vidas”.

Y resume así la cruda realidad que se vive en este Veracruz bajo fuego:

“En lo personal, creo que existen tres líneas de trabajo, la autocensura por parte del reportero por temor a sufrir una represalia, la autocensura por previa amenaza o posterior amenaza y la autocensura por parte de los medios de comunicación aunque el reportero envíe su información”.

DOBLE ASESINATO

En su informe “Doble asesinato: la prensa entre la violencia y la impunidad”, de la organización Artículo 19, presentado a principios de marzo, se enfatiza la difícil situación que enfrenta la prensa en Veracruz para informar ya no de los entretelones de la disputa entre cárteles si no por lo menos de los eventos policíacos cotidianos.

También alerta sobre el surgimiento en Veracruz de una zona del silencio como ha ocurrido ya en otras regiones del país, tras el asesinato de nueve periodistas.

Rememora el informe como signo ominoso: “el sometimiento del periodismo en Coahuila, Durango y Tamaulipas fue un proceso gradual y doloroso que costó vidas de reporteros y editores a lo largo de varios años”.

“Los mensajes contundentes y las lecciones de silencio fueron impuestos a la prensa local, de manera que hoy pueden advertirse periodos de tensa calma, rotos por algún evento violento que generalmente intenta frenar los asomos de libre circulación de información, particularmente la relativa a la acción de grupos delictivos”.

“El mismo proceso de descomposición empieza a verse al sur del litoral del Golfo, donde se vive un nuevo y hasta ahora exitoso ensayo de silenciamiento de medios. Si bien se le considera como parte de la región sureste, Veracruz completa un preocupante escenario de periodistas asesinados, desaparecidos, desplazados o privados de la libertad, imagen que comparte más con sus vecinos al norte que con los estados de la zona en la que se le ha agrupado”, expresa el informe.

LA MANO OFICIAL

La mano del gobierno en este silenciamiento por intimidación se hizo visible a mediados de marzo cuando la publicación de unas fotografías de miembros de una guardia civil armada en el municipio de Tlalixcoyan, próximo a la conurbación Veracruz-Boca del Río.

Las imágenes captadas por el fotoperiodista de la agencia Cuartoscuro Félix Márquez desataron el descontento oficial, primero a través del secretario de Gobierno, Gerardo Buganza, quien desacreditó al fotógrafo y puso en duda la autenticidad de las imágenes.

Un día después, Buganza fue secundado por el secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez, quien aventuró la manipulación de las capturas y un trasfondo político electoral del fotoperiodista y amagó: “ya lo dijo el secretario de Gobierno ayer, el que debe estar detenido es el que fue a tomar las fotos”.

Ese mismo día, el gobernador Javier Duarte remataría al señalar que el trabajo de Márquez era una “vacilada”, quien al final, por razones de seguridad, fue sacado temporalmente de Veracruz por la agencia Cuartoscuro.

CÓDIGO DEL SILENCIO

Arturo Matiello Canales, presidente del Consejo de Participación Ciudadana de la delegación de la PGR en Veracruz, observa que el galopante silenciamiento en la prensa sobre hechos de violencia que afectan a Veracruz, es un fenómeno peligroso, que aísla a la sociedad y la vuelve más vulnerable.

Y el silenciamiento alcanza a la misma población rehén de “una impunidad bárbara” y la desconfianza hacia las autoridades.

“Hay gente que ya no quiere reportar al teléfono situaciones pues no vayan a ser interceptadas las líneas y sufran un agresión, no de las fuerzas armadas, sino de otras autoridades y delincuentes”, afirma.

-¿Que está pasando en la conurbación Veracruz Boca del Río de lo que ya poco se sabe por los medios y en otras regiones?, se le cuestiona.

“Lo que ocurre es que somos un mercado fértil para el mercado de las drogas y por eso se disputan las plazas los grupos delictivos y cuando eso pasa, entonces quieren meter mano a la extorsión, al secuestro, al robo, la trata de personas, a todo tipo de delitos”, expone el también académico.

Matiello Canales avizora pesimista sobre el futuro en la región: “en este momento todavía no llegamos al pico de violencia…nos falta mucho”.

*JORGE MORALES: Periodista egresado de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Veracruzana. Lleva más de 10 años ejerciendo el periodismo. Actualmente es integrante de la Comisión Estatal de Atención a Periodistas.

Amigzaday-th
Amigzaday López Beltrán
Periodista mexicana radicada en Inglaterra. Fundadora de Revista Era. Ha colaborado como freelance en medios como Proceso, Democracia Abierta, Houston Chronicle y Women in Journalism.

Comentarios

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

Related Articles

Disminución en las previsiones de crecimiento en Reino Unido, reducción de impuestos a empresas y amenazas para los beneficiarios del Crédito Universal

El ministro de Hacienda, Jeremy Hunt, dio a conocer su declaración de Otoño donde anunció una reducción de impuestos para empresarios de hostelería,...

Seguro de desempleo en Reino Unido podría detenerse inmediatamente después de 12 meses, amenaza ministro de Hacienda

El ministro de Hacienda, Jeremy Hunt, advirtió que se impondrán "sanciones más estrictas" a las personas "que deberían estar buscando trabajo, pero no lo...

Sunak enviará un proyecto de “ley de emergencia” para que Ruanda sea seguro para el envío de migrantes

El portavoz del primer ministro afirmó que la "legislación de emergencia" sobre Ruanda se elaborará "en las próximas semanas".

Translate »